Redes Cristianas ha realizado una reflexión que ha hecho llegar al Vaticano de cara al Sínodo Universal. Nos parece destacable la referencia a las inmatriculaciones que contiene:
«Menos comprensible resulta aún la apropiación o inmatriculación que esta Iglesia ha venido haciendo de unos 100.000 bienes inmuebles desde 1946 al amparo de leyes ilegítimas, previas o contrarias a la misma Constitución. Ante el crecimiento exponencial de la exclusión y la pobreza, nos avergüenza conocer que la Iglesia posee alrededor del 80% de los bienes histórico-culturales de este país. Con esta ingente acumulación de bienes en inmobiliario y finanzas, no se entiende que pueda decirse ‘pobre entre los pobres’ y difícilmente se puede advertir coherencia en la defensa de los DD. HH.»
Apostamos por una Iglesia: «Resuelta a devolver a la sociedad civil —dado el enorme escándalo que está causando en nuestros días— todos los bienes histórico-culturales que ha inmatriculado durante más de 70 años al amparo de unas leyes nacidas bajo la dictadura franquista o abiertamente inconstitucionales. Este desprendimiento de lo que no es suyo podría ser un buen signo, entre los pobres y la sociedad donde ha perdido mucho prestigio, de otro modo de estar en la vida y en la historia.»